"California en llamas: Toque de queda impuesto tras la detención de 20 sospechosos de robos"
Las autoridades locales han establecido, para la noche del viernes al sábado, un toque de queda en las áreas afectadas por los devastadores incendios con el fin de garantizar la seguridad pública y prevenir saqueos. Adicionalmente, se ha intensificado la seguridad con la presencia de soldados de la Guardia Nacional de California. Las restricciones estarán en vigor desde las 18:00 hasta las 6:00 de la mañana, hora local. Aproximadamente 20 personas han sido detenidas por robos en las viviendas afectadas. Por otro lado, el incendio Kenneth, que se originó la tarde del jueves, se está investigando como un fuego intencionado, y hay un sospechoso arrestado. Los incendios de Eaton y Palisades continúan descontrolados. El frente en Pacific Palisades ha estado ardiendo desde la tarde del martes y se ha convertido en “uno de los desastres naturales más devastadores en la historia de Los Ángeles”, según informaron las autoridades. Una nueva orden de evacuación fue emitida la tarde del viernes debido a la expansión del incendio hacia el noreste. Las llamas que consumen Los Ángeles y sus alrededores desde el martes han cobrado al menos 11 vidas, destruido más de 145 kilómetros cuadrados (equivalente a dos veces la superficie de la isla de Manhattan), arrasado miles de estructuras y obligado a la evacuación de más de 150.000 ciudadanos.
Para grandes sectores de la derecha estadounidense, los programas de inclusión y diversidad han sido un supuesto factor en la propagación de los incendios más devastadores en la historia de la ciudad de Los Ángeles. “Conozcan a la jefa del Departamento de Bomberos de Los Ángeles (LAFD) Kristin Crowley”, comienza una publicación de la cuenta de X (antes Twitter) Libs of TikTok, que cuenta con casi cuatro millones de seguidores y es conocida por esparcir mensajes de odio. “Presume de ser la primera jefa mujer y LGBTQ del LAFD. Promover una cultura de DEI [siglas en inglés para diversidad, equidad e inclusión] es su prioridad. ¿Esto le hace sentirse más seguro?“, continúa el mensaje.
Como este, muchos más han circulado en redes. Insinúan que el género y orientación sexual de la jefa de bomberos, así como su compromiso con la diversidad y la inclusión, afectaron la capacidad de prevención y de respuesta ante los incendios que siguen ardiendo en Los Ángeles. Es una instancia más de la politización de catástrofes naturales en Estados Unidos.